Cuando usted cree que tiene “la idea del año” que puede resultar en un negocio muy exitoso, esto es lo que tiene que hacer inmediatamente después de considerarla.
En Colombia la idea de tener un negocio propio es muy común. De hecho, hay varios índices y estudios que han calificado al país como una de las naciones con mayor iniciativa y determinación para crear empresa, posicionándolo entre los primeros tres lugares durante los últimos cinco años.
No obstante, también existen varias situaciones y condiciones que hay que considerar para renunciar y empezar a crear empresa. Quizá por eso mismo es que existen varios miedos y mitos alrededor del emprendimiento, que hacen que muchos colombianos desistan. Pero, y quienes no lo hacen, ¿cómo lo logran?
Muchos estarán leyendo este artículo y su respuesta, seguramente será “no es nada fácil, pero tampoco es imposible”. El emprendimiento empieza desde el momento mismo en el que se considera una posibilidad para resolver una necesidad o un problema de una población específica, ya sea a través de un producto o de un servicio.
Con esto, la idea es lo vital, es el corazón y tiene que ser original, práctica, sencilla y viable; lo cual también se determinará con lo que se conoce como un “plan de negocio”. Sí, puede que suene a una tarea del colegio o de la universidad, pero este documento es vital para darle la ruta adecuada a su idea.
“Un plan de negocio es la elaboración de una serie de tareas y objetivos para establecer la viabilidad de un proyecto, ya sea uno totalmente nuevo o la ampliación de uno existente. Siempre que se tenga un nuevo proyecto, es de gran importancia desarrollar un plan de negocio, es un ejercicio donde se puede simular el futuro, adicionalmente si le agregamos varios escenarios podemos ver que tan sensible puede ser ese negocio a diferentes variables externas o internas”, explicó Xavier Malo Puig, Vicerrector Administrativo y Financiero del CESA.
La realización de este plan requiere de constancia, dedicación y paciencia. Según Billy Crissien, Director del IDELI y ECOS de la Universidad EAN, “siempre se recomienda en todos los casos, dedicar un tiempo justo a la elaboración del plan de negocio que puede ser amplio o sintético de acuerdo a la naturaleza de la empresa que se está creando. Esto permite al emprendedor tomar decisiones acertadas y ajustar sus estrategias empresariales de acuerdo con el rumbo y énfasis del mercado y de las contingencias que se puedan presentar”.
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De acuerdo con el experto Crissien, un plan de negocio es importante tanto para el comienzo de un emprendimiento, como para una empresa que ya está operando. En el primer caso el plan de negocio se convierte en la primera carta de navegación del emprendedor.
“Si ya está operando, cobra vital importancia pues permite replantear cualquier acción que en el pasado no haya funcionado como estaba previsto, aplicando las medidas correctivas necesarias. Entonces el plan de negocio es un documento dinámico que debe estar en constante revisión para actualizar los requerimientos oportunos de la empresa”, explica.
No obstante, quizás también habrá escuchado casos de empresas que empezaron sin un plan, pero “quienes lo hicieron sin saberlo arrancaron con un riesgo mayor. Ahora bien, si ya arrancó su proyecto y no ha hecho un plan de negocio: hágalo”, añade el experto del CESA.
El emprendedor debe definir claramente qué necesidad resuelve su empresa en el mercado y por qué se justifica que exista. Esta es la primera información básica que involucra la visión empresarial y las diferentes propuestas de valor que le darán viabilidad a la idea empresarial.
“Entonces ahí comienza el proceso de planeación para llevar a la empresa a los escenarios deseados que le permitan hacer viable la estrategia organizacional” añade Crissien, de la EAN.
Esto implica que tiene que tener en cuenta varios factores, según Xavier Malo Puig, directivo del CESA:
• Conocer su competencia y las condiciones del mercado.
• Tener una idea de cuales van a ser sus recursos tanto monetarios como de tiempo.
• Los recursos serán propios o necesitará conseguir recursos externos.
No hay una fórmula ni plantilla ni estrategia básica para todas las empresas, para todas las ideas. Esto dependerá de lo que vaya a hacer. Eso sí, tenga en cuenta que un buen plan de negocio debe involucrar todos los aspectos de una empresa –según el directivo del CESA-:
• Cómo será la estructura organizacional y de gobierno (estatutos)
• Revisar todos los permisos legales que se requieren para comenzar su negocio
• Variables económicas
• Una estrategia comercial y de ventas; una DOFA
• Un plan de recursos humanos y un plan financiero.
Si quiere tener un mayor conocimiento o guía sobre cómo realizarlo, el experto Billy Crissien, Director del IDELI y ECOS de la Universidad EAN, nos deja aquí algunas pautas.
Fuente: www.finanzaspersonales.com.co