El impulso de la economía con el uso de las tecnologías en el aula

El uso de las Tecnologías de la Información y de la Comunicación (TIC) en la educación es imprescindible hoy día y, a veces es importante conocer la visión de un país desde el exterior (en este caso, desde España) para apreciar y valorar el gran trabajo que se hace en Colombia. Tanto el Ministerio de Educación Nacional como el de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones diseñan programas y ejecutan actuaciones que demuestran que el gobierno de Colombia pretende elevar el nivel tecnológico del país como señal de progreso, acorde con las demandas del siglo XXI. La prosperidad para todos también tiene como objetivo convertir las tecnologías en invisibles porque su uso es cotidiano, se ha democratizado el acceso a Internet y se vencen las desigualdades económicas, auténticas barreras para la población más desfavorecida.

 

Las TIC abren las aulas a otras realidades, conectan la educación con la vida y preparan a los alumnos para un presente que forma parte del futuro. La formación es la mejor inversión, con efectos inmediatos en la economía del país. La fórmula Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+I) se ha de comenzar a aprender y practicar en los centros educativos. Las tecnologías son grandes aliadas para que la formación se consolide y, en un futuro, el mundo de la empresa se beneficie a corto, a medio y a largo plazo de la calidad de la economía del conocimiento que se genera en las Instituciones Educativas (IE).

 

El programa educativo del Gobierno “Computadores para Educar” está realizando una gran labor en el país con el reparto de máquinas: por ejemplo, la entrega de casi medio millón de computadores y tabletas a sedes educativas en los 32 departamentos del país. Ahora falta por saber la efectividad práctica de este ingente esfuerzo económico y la rentabilidad educativa, que dependen de la formación del profesorado, de la accesibilidad rápida a recursos y a Internet y de la adaptación del currículum a las formas de aprender y enseñar que implican las TIC.

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No cabe duda de que medidas como esta son muy importantes y se ha de felicitar a las autoridades por una apuesta que también fomenta la investigación, la compraventa de equipos informáticos, el mantenimiento, los recambios y las redes para la conectividad. Se supone que el seguimiento del grado de cumplimiento de los objetivos pedagógicos previstos se darán a conocer más adelante, dejando un margen de tiempo para evaluar proyectos tecnológicos que necesitan de un recorrido temporal amplio. Los resultados educativos con las TIC van más unidos a destrezas, habilidades y nuevas formas de trabajar en equipo que no a la evaluación de los tradicionales conocimientos memorísticos: no olvidemos que hoy Google lo sabe casi todo. El mundo de la economía necesita esta formación. Otro de los efectos muy destacables del programa “Computadores para Educar” es la reducción del abandono escolar: la deserción del alumnado es menor.

 

Los computadores de momento no favorecerán la suplantación del docente, se complementarán para estimular el aprendizaje presencial y online. Crece la Importancia del eLearning, la educación en línea, una opción en auge con gran futuro que no para de crecer, por ejemplo con experiencias de éxitos educativos online: Khan Academy o profesores youtubers con millones de seguidores. La tecnología no es una finalidad en educación (excepto en los estudios técnicos) sino una metodología para conseguir otros objetivos más transversales.

El impulso de la economía con la tecnología en el aula se puede enmarcar en los siguientes aspectos:

• Compra y reparto de equipos: bien sea a nivel gubernamental, ya señalado anteriormente, o de forma individual, que representan grandes transacciones económicas. Un ejemplo es el impacto de los celulares, con gran penetración entre la población urbana y rural. Generan un gran movimiento económico y son potentes máquinas para aprender, bien sea gracias a sus prestaciones o por la tecnología en sí. El apoyo de la industria es muy importante para favorecer los cambios en la educación. No olvidemos que las nuevas ideas se suelen poner en práctica primero en los sectores económicos y tardan mucho en la educación, tradicionalmente conservadora.

• Apertura a nuevos productos que mejoren la educación: en este portal se informa a menudo de empresas tecnológicas que presentan máquinas y accesorios capaces de ayudar a impartir clases de otra manera, a gestionar de forma más efectiva las IE o a mejorar las redes. Los gadgets son un motor económico que favorecen el cambio y alimentan el espíritu innovador de la comunidad docente. La adaptación a las nuevas posibilidades de las máquinas favorece una mentalidad digital, educa en la flexibilidad del pensamiento y fomenta la amplitud de miras.

• La generación de conocimiento en las IE gracias a programas educativos que enseñan a elaborar productos que pueden tener éxito en el mercado: la creación de Apps para celulares, la robótica educativa, los drones, el movimiento “Hazlo tú mismo” son claros ejemplos de cómo la economía de un país se puede beneficiar de las innovaciones generadas en los centros educativos.

• El impulso del espíritu innovador, la creatividad, la emprendeduría, el I+D+I: no importa tanto el producto final como el aprendizaje y la implementación de las habilidades que demanda la industria para generar nuevos productos. También la capacidad para aprender del supuesto y posible “fracaso”: es un buen revulsivo para superarse, mejorar y mirara adelante.

• La entrada de la tecnología en las familias a través de la comunidad educativa de las IE: aprender en las aulas significa también introducir conocimientos en el núcleo familiar, generar sinergias de cambio, curiosidad por aprender, necesidad de comprar tecnologías que les ayuden a abrirse al mundo y a tener más información y criterios para no ser engañados. También con la sensibilización de familias con proyectos Escuela TIC sobre uso responsable de Internet, que ha llegado a 203.000 padres. De esta forma, tienen preparación para acompañar a sus hijos en sus actividades con las TIC.

• En las comunidades rurales los celulares y computadores han servido para compartir el precio de productos como el café o la madera, consultar los mercados, conocer soluciones a problemas y abrirse a otras realidades. La economía doméstica se ve favorecida por la transparencia gracias al acceso a la información. Uno de los grandes problemas que exigen soluciones es la creación de espacios para acceder a Internet: la respuesta es la inauguración de 610 Kioskos Vive Digital, con la oportunidad de educar en múltiples espacios , completando 1.733 lugares de acceso a Internet en zonas rurales. También con la creación de zonas wifi gratuito, otro gran objetivo del Ministerio TIC. O el proyecto de las tarifas sociales para hogares con escasos recursos.

• La mayor formación en competencia digital es un alto valor añadido para la educación y también para la economía. Por ejemplo, la certificación de más de 3.500 orientadores escolares y docentes de informática, imprescindibles para sacarle el máximo rendimiento al reparto de equipos y para fomentar el uso de las TIC en la educación.

• Los programas gubernamentales y privados para fortalecer la industria TIC en Colombia, con becas para que 8.000 jóvenes puedan estudiar. Posteriormente y en un futuro estos jóvenes necesitarán ayudas en cuanto a la financiación para los emprendimientos de base tecnológica desde el sector público.

La economía, la educación y las TIC caminan juntas en las sociedades del siglo XXI como vías para el progreso y para superar las desigualdades. Produce una gran satisfacción cuando una persona joven descubre que puede hacer su sueño realidad gracias a las oportunidades que le brindan los programas gubernamentales de educación y el poder de las TIC. El esfuerzo de Yina Helena García es muy significativo: vive en un entorno rural, quiere estudiar, superarse y ejercer su carrera de Administración de Empresas y Gestión Ambiental. Un gran ejemplo para su hermano, un orgullo para su familia y también para todos nosotros.

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